Dr. Julio Sagredo y Dra. Belén Benito
En 2023 estamos alcanzando las temperatura más altas del año y las personas con diabetes tienen mayor riesgo de complicaciones derivadas del exceso de calor. Revisamos algunas de estas complicaciones y las medidas más importantes para prevenirlas:
Es imprescindible continuar con la educación terapéutica de las personas con diabetes insistiendo en la adecuada hidratación y recordando que es necesario más que nuca beber, aunque no se tenga sed, por supuesto evitando el alcohol y las bebidas con azucares más o menos ocultos.
En estas fechas además solemos disfrutar de vacaciones, es habitual que se produzcan modificaciones en la alimentación y en la actividad física. Se deben valorar los cambios y si es necesario realizar ajustes en el tratamiento farmacológico.
Para los viajes a lugares más alejados es necesario prevenir las necesidades de medicación y si se fuera a producir un importante cambio de huso horario y se trata de personas tratadas con insulina deben realizar mayor número de autoanálisis para valorar los ajustes oportunos. De nuevo la importancia de la educación terapéutica abordando previamente todos estos factores.
Los cuidados del pie también deben revisarse en esta época del año para evitar ir descalzo o el uso de calzado inadecuado, que favorece la aparición de lesiones en los pies y sus graves consecuencias
Por último, recordar a las personas que precisan tratamiento con insulina, que deben tener en cuenta la conservación de la insulina: temperatura ideal para la insulina es entre 4 y 8 grados centígrados. La insulina en uso puede estar a temperatura ambiente, pero evitando que se superen los 30 grados.